CHRIS Y EL VESTIR LITÚRGICO PREHISTÓRICO

Para la presente temporada primavera/verano boreal, Christopher Kane -joven promesa del diseño británico y eventual asesor estilístico de DoñaTela Mersache- diseñó una colección enteramente basada en la Prehistoria.

¿Pues sabes qué te digo, Chris?
¡¡¡Pero por favooor!!!

Hay que tener MUCHO cuidado con la cuestión del diseño "temático" porque -por lo general- en lo que desemboca es en una cosa muy traída de los pelos cuyo resultado poco tiene que ver -al final- con lo deseado al principio, o nada, al fin y al cabo, con la intención inicial.

¿Mejor sabes qué, Chris? Decirse a sí mismo: "¡Voy a hacer unos liiinnndos vestidos!", que te da más libertad y no fuerza NADA.

De acuerdo con las notas del programa del desfile citado por QueEstiloQueTengo.com, el joven talento y su hermana se pusieron manos a la obra, y lo que surgió (entre otras cosas en las que preferimos no ahondar) es "una obsesión con las escamas, que, DE ALGÚN MODO (sic), se transformaron en recortes semicirculares en 3D en organza".

Veamos no uno, sino tres ejemplos:


¡PUES NO!

Lo que te quedó, Chris, son vestidos hechos de hostias católicas, que A LO QUE MENOS HACEN REFERENCIA es a la Prehistoria.

Varios de ellos, claro, se convertirán en diseños atemporales.
No por consistir en hábitos de sumo valor material y estético que se puedan vestir toda una vida, no; más bien porque NO HAY ocasión en la que vestirlos: ni de tarde, ni de noche, ni de día, ni pa' la oficina, ni pa' la disco, ni para asistir a un vernissage o a una cita. ¡Pa' ná' de ná'!

Además, Chris, ¡por favor!
Como nos hace saber nuestra amiga La Wiki, "las hostias que no son consumidas suelen quedar reservadas en los sagrarios o tabernáculos de las iglesias".
Por eso: cuidadito con el asunto "cromática".

Cuando la organza es en blanco níveo, tus diseños "misales" son una cosa; no salgamos de ahí.
Porque cuando son en tonalidades beige parece que el sagrado trozo de pan, además de ácimo (sin levadura), sea rancio -como muestra la comparación de 3 modelos distintos en la imagen a continuación-:

Click en la imagen
(de hostias olvidadas en el sagrario durante décadas)

para agrandarla

Chris: cuidado. Porque vas a llegar a lo del vestido de Miley confeccionado con bases para pizza requemadas por los bordes.

¡¡¡Pero por favooor!!!

PRESENTACIÓN Y MILEY

Esto es un blog de moda, y por moda se pueden entender muy muchas cosas.

Por eso, y para ser más específicos, vamos a aclarar.

Este es un blog de aquella moda que lo hace a uno exclamar "¡¡¡Pero por favor!!!", cuando no "¡¿Pero a quién se le pudo pasar por la cabeza semejante cosa?!".

Aquí NO vas a encontrar las claves para el próximo otoño, no. Bueno, sí, pero no se va a hablar bien de ellas. ¿Print leopardo, o satén? ¡Pues ninguna de las dos!

Vivimos en un mundo cada día más feo a la vez que presuntuoso: la moda -lo que popularmente se aprecia como tal- no escapa a este vórtice de "horribilidad" ("horribilitud"?), especialmente la moda femenina.

Empecemos a enumerar: modas retro que hacen que se vuelvan a usar masivamente prendas y estilos que NUNCA deberían haber escapado del siniestro arcón de los malos recuerdos estéticos (como no podía ser de otro modo, puestos nuevamente en uso por gente "divina" y "cool" que hace algunos pocos años atrás no hacía sino despreciar -y con cierta justicia- esos mismos bodrios); profusión de siluetas que no hacen sino arruinar el buen aspecto exterior de personas de cuerpo promedio (no hablemos de cómo quedan a otras que estén apenitas fuera de línea o sin la estatura adecuada para lucirlas): silueta "globo", silueta "trapecio" (hasta la silueta "octógono"... ¿los diseñadores no piensan detenerse?), silueta "campana" (¿por qué no crear, ya puestos, una silueta "cencerro"?), silueta "bombona", silueta "garrafa", y así sucesivamente; profusión de lazos ñoños e innecesarios para puntuar prendas que de por sí no valen nada; crómaticas grises, opacas -y ñoñas también- en ropas y estilismos juveniles y hasta para adolescentes, cuando no los colores fluorescentes que destruyen córneas y retinas humanas a diestra y siniestra en aras de recuperar el espíritu "creativo" y "efervescente" de los años '80 (¡¿y quién es el demente que quiere que regresen?!); braguetas de pantalón kilométricas, sandalias y chanclas -tanto de chica como de chico- tan abiertos por delante que hacen que las falanges se vuelvan kilométricas también, y tiros kilométricos de pantalones (ambos sexos) de vaga inspiración neo-hippie/neo-raver/hindú (y tantas otras cosas que puedan entrar y triturarse con la minipimer de diseñadores de formación académica cuanto menos dudosa), tiros estos que no hacen sino producir el efecto de parecer que quien los porta lleva debajo abultados pañales para adultos (el popularmente denominado efecto 'cagao').

¿Queréis que siga? La lista no acabaría, de modo que post a post trataremos el tema.

Por eso: si AMAS la moda, no puedes no ODIAR lo que hay en los escaparates, desfiles y tiendas.
Ni hablemos de si el presupuesto que uno tiene es acotado: bueno, aunque en ese caso, ¡nuestros amigos los chinos siempre vendrán a nuestro rescate! Porque si tenemos que fiarnos de cadenas como Zarra, Monga, Bershko, Blanca, Pumkie, Penca, Stradibaños, Ya-mamas, y engendros de la misma calaña -en su mayoría salidos de los tentáculos del pulpo Grupo Textil Imitex-, ¡¡¡bien vamos!!!

Nada se salva (no, los chinos tampoco: eran nuestra última esperanza): cadenas, diseñadores, marcas de lujo, celebridades a las que visten, gente por la calle, modernukis de mierda.

No me voy a ir sin dejar un primer ejemplo VISUAL de lo hablado, uno entre millones que podríamos analizar; miremos si no a la cándida y fresca Miley Cyrus asistiendo -hace un par de meses ya- a la ceremonia de entrega de los premios Oscar 2009:

Algún malvado y perverso diseñador habrá pensado: "Ella es joven, exitosa y atrevida: es la oportunidad de mostrar mis más osados diseños" y le enchufó a la pobrecita (recordemos que los adolescentes YA DE POR SÍ no tienen el mejor de los gustos en el vestir) nada más ni nada menos que... ¡¡¡UN VESTIDO CUYA FALDA ESTÁ COMPLETAMENTE HECHA DE TAPAS DE MASA HOJALDRE TAMAÑO PIZZA!!!

¡¡¡Pero por favor!!!

Las tapas de tarta de hojaldre de la falda están a su vez -no se sabe muy bien con qué fin- decoradas/espolvoreadas de ingredientes desconocidos: azúcar impalpable sucia, confites grisáceos vaya uno a saber de qué sabor, etc.
En la medida en que su paso por la alfombra roja avanza, su actitud va cambiando, y, tras una inicialmente confidente -y segura de sí misma- Miley, vemos aparecer el terror interno que la súbita conciencia del vestido que se ha puesto hace aparecer en ella.

Miremos si no la primera foto nuevamente: ella es toda determinación y garbo.

"¡Tooomaaa Nicole! ¡Tooomaaa Sharon!
Quítense del medio YA que la que está en el candelero ahora...
¡soy YO!"

En un segundo momento, instantes después, avista claramente y a la distancia al maestro pizzero del servicio de catering del evento que -ante semejante exhibición de falda gastronómica- mira a la niña con la fantasía de cubrirla de salsa pomodoro y mandarla al horno tras extenderla en una tartera a fuerza de pala de madera, mientras se refriega las manos con el sueño de devenir el nuevo Ferrán Adriá.
La expresión de saludo cauteloso de Miley lo dice a las claras:

"Aaayyy, ¿por qué ese señor me mira tan fijamente
mientras trocea mozzarella?"

A estas alturas, el cinturón con motivo de conchas marinas y perla central no lograrán que NADIE piense que este vestido es de "inspiración sirena" o nada por el estilo: el pabellón del mal gusto ya ha engullido a este atuendo con su portadora.

En un tercer momento, ella TRATA de recuperar la naturalidad: no puede evitar, sin embargo, tener que hurgar en su falda para quitarse algún trozo de tomate o de pepperoni que, o el diseñador se olvidó al montar las tapas de tarta, o el maestro pizzaiolo al acecho les arroja como señuelo a las bases de pizza para arrastrarlas hacia su ya precalentado horno:

"Gggñññggg, creo que por fin he dado con el filetito de anchoa
que me estaba pinchando un poco por debajo..."

El drama sigue, ya ahora con ella denunciando a cámara a quien la toma por Embajadora Mundial y Pública de las Delicias para Hornear mientras arrastra las masas hojaldradas cual puesto ambulante de comidas al paso, a la vez que requiere los servicios de otra asistente al evento para despegar las tapas de pizza entre sí, ya que el burro del diseñador OMITIÓ incluir capas de papel de estraza que evitasen el pegoteo natural de la masa húmeda!!!

"Si lo agarro al condenado ese... ¡¡¡lo matooo!!!"

Por suerte (para ella y para nosotros) luego la mona muchacha se nos perdió de vista.

Miley linda (otras celebridades escuchad también), tres palabras pa' la próxima vez que tu estilista te proponga una cosa así: ¡¡¡pero por favor!!!